Lógicamente, tu perro necesitará un comedero y un bebedero. Tienes que elegir los más adecuados para su tamaño. Ten en cuenta que los comederos y bebederos deben ser altos para perros de tallas grandes y gigantes.
Los mejores suelen ser de plástico duro, pero asegúrate que sean lo suficientemente pesados como para que el perro no los voltee.